miércoles, 2 de octubre de 2013

Sopa de sobre . José Luis Alvite

Sopa de sobre . José Luis Alvite

Ahora se hacen los niños con algo de la hostelera mística del daiquiri, mezclando esto y lo otro, añadiendo aquel condimento, a la temperatura ideal, en la coctelera del laboratorio. Dicen los científicos que lo que ocurre no es que las mujeres sean menos fértiles, sino que todo se debe al semen de los hombres, que tiene la consistencia culinaria y la flojedad genética de la sopa de sobre. Incluso hay matones que le hacen ropita al revólver. Según los expertos, el semen de ahora sólo sirve para pegar carteles del Banco Ambrosiano y en casos extraordinarios, para croquetas de ave. Se dice que Norma Duval está embarazada. Pero no se habría quedado embarazada en una cama, en un ascensor o en un pasamanos, sino contra reembolso en uno de esos laboratorios en los que hacen niños fríos y biselados aprovechando el esperma que guardan en la nevera con el apio y los refrescos.Tía Pepita fue comadrona en Cambados, comadrona de las de antes, de las que traían los niños al mundo gritándoles por un megáfono al mismo tiempo que empleaban con las mañas de la fontanería aquellas terribles herramientas con las que podrían haberle cambiado la rueda a la berlina de la funeraria. Y tía Pepita se murió en los viejos tiempos, cuando lo último que había visto in vitro eran las fotografías del novio que se le metió cura porque al interior de tía Pepita, ¡Dios santo!, sólo se podía entrar con una orden judicial y en presencia de la Guardia Civil.Norma se nos queda embarazada casi fuera del tiempo civil de la fecundidad. Y eso ocurre porque hay una fertilidad tardía y química que lo que nos trae en el fondo no es un niño de los de antes sino un niño anterior, un niño corno de cripta, una especie de jefe local del Movimiento. Y no es descabellado que de ahora en adelante,a los partos asistan la comadrona, el tipo con la manguera de la epidural y el arqueólogo.