domingo, 2 de junio de 2013

Soldadito - Jesús Nieto Jurado


Soldadito - Jesús Nieto Jurado
A ARTUR MAS lo pensamos bien peinado, a punto de revista y de besar la senyera sin lengua. Puede que en la explanada de Montjuic. Le veo marcial, con ese mentón altivo que le brota a la burguesía catalana desde tiempos del Condado y que esculpió Marsé en Últimas tardes con Teresa: cuando hacía lírica o sociología con las barbillas y las contraponía al moreno picado de liendres de un charnego que, hoy, le bailaría el agua electoral o a Pere Navarro o al honorable Pujol y a esa prole suya tan inequívocamente emprendedora en el business–honorable también– de revisar la junta de culata o los frenos de mi SEAT Cuenca.
A Mas, retratado como un mariscal frente a la Plaza Roja de Moscú, puede que le sienten como un guante los galones que se inventa en esa patria de juguete que ya hasta nos enternece por tanto empecinamiento y tantas deudas. Aunque tenga que comulgar en el camino a la Libertad junto a la ikurriña coyuntural y el trueno de Junqueras, Artur Mas es un principito a quien le resbalan las faldas escocesas, a lo Wallace, y le ponen los uniformes, tanto o más que a su paisano Eugenio D’Ors. La percha de Mas, modelo como salido a fumar en el convite de una boda, no admite, obvio, el sarga legionario o el polvo de las guardias africanas, pero puede combinar su tupé menguante con un modelo a lo Kaiser Guillermo, combinable con el casco prusiano si hay gala sin abucheos en el Liceo o así va la moda macho de la Gaudí este año. Quiere Mas un ejército a la sombra de la OTAN, pues su Arcadia con barretina es un peligroso enclave geopolítico; de Creus a Tortosa apuntan unos misiles que no silencian ni las rosas de las Ramblas ni la leyenda ñoña de que Messi es la paloma unicef de Picasso.
Mas, de los quintos del cuartel del Bruc, nos da el perfil de un soldadito de plomo derretido sobre quien se arremolinan diariamente las boutades o las ocurrencias con la imaginación disparada de quien tiene las arcas vacías y ha de entretener las hambres con el ensueño. Quizá desconozca que, frente a Els Segadors, la tropa va mejor con Concha Velasco en el MP3 y Marta Sánchez en el portaaviones.
@jesusNjurado
«Mas es un principito a quien le resbalan las faldas escocesas y le ponen los uniformes»